Otra tarde a un excelente nivel la de Perera en Tomelloso, donde ha entendido a la perfección a los dos toros de su lote, astados que se han dejado y que le han permitido cortar dos orejas y salir a hombros.
El primero de ellos se comportó más desclasado al principio, pero fue un toro noble, sin maldad y con buen fondo. Le costó seguir la muleta y romper hacia delante, pero Perera lo templó bien, toreando al principio de la faena para el toro, empujándolo siempre. Llegó un momento en el que estuvo a gusto con él, constando la faena además de una segunda mitad en la que se metió en los terrenos del toro, aguantándole unos parones que llegaron mucho al público. Perera le sacó todo el partido posible en una labor limpia que acabó con el premio de una oreja después de matar de estocada trasera y dos descabellos.
El quinto pareció en principio que estaba lesionado o que podía tener alguna dificultad en la vista. Con el capote fue imposible el lucimiento, pero después se recuperó y resultó ser un toro con clase que se dejó mucho. Perera lo aprovechó para construir una buena faena, muy centrado, templado y superior a su oponente. Primero sobó y afianzó al toro, que embestía con clase y permitió al torero estar a gusto por los dos pitones. Toreó despacio, con la mano muy baja, sintiéndose en los muletazos. Perera volvió a pinchar antes de lograr una estocada y por eso el posible premio de dos orejas quedó en una sola.
En la Plaza de Toros de Tomelloso con algo menos de tres cuartos de entrada se han lidiado toros de Carlos Núñez (3º bis), bien presentados y que en líneas generales se dejaron.
Miguel Abellán, oreja y dos orejas
Miguel Ángel Perera, oreja y oreja
Alejandro Talavante, oreja en ambos
Otra tarde a un excelente nivel la de Perera en Tomelloso, donde ha entendido a la perfección a los dos toros de su lote, astados que se han dejado y que le han permitido cortar dos orejas y salir a hombros.
El primero de ellos se comportó más desclasado al principio, pero fue un toro noble, sin maldad y con buen fondo. Le costó seguir la muleta y romper hacia delante, pero Perera lo templó bien, toreando al principio de la faena para el toro, empujándolo siempre. Llegó un momento en el que estuvo a gusto con él, constando la faena además de una segunda mitad en la que se metió en los terrenos del toro, aguantándole unos parones que llegaron mucho al público. Perera le sacó todo el partido posible en una labor limpia que acabó con el premio de una oreja después de matar de estocada trasera y dos descabellos.
El quinto pareció en principio que estaba lesionado o que podía tener alguna dificultad en la vista. Con el capote fue imposible el lucimiento, pero después se recuperó y resultó ser un toro con clase que se dejó mucho. Perera lo aprovechó para construir una buena faena, muy centrado, templado y superior a su oponente. Primero sobó y afianzó al toro, que embestía con clase y permitió al torero estar a gusto por los dos pitones. Toreó despacio, con la mano muy baja, sintiéndose en los muletazos. Perera volvió a pinchar antes de lograr una estocada y por eso el posible premio de dos orejas quedó en una sola.
En la Plaza de Toros de Tomelloso con algo menos de tres cuartos de entrada se han lidiado toros de Carlos Núñez (3º bis), bien presentados y que en líneas generales se dejaron.
Miguel Abellán, oreja y dos orejas
Miguel Ángel Perera, oreja y oreja
Alejandro Talavante, oreja en ambos