Los de Jaralta entraban con ganas en el mítico coso de Pozoblanco un día antes de que se celebrara el 25 aniversario de la astada mortal, en la misma arena, del maestro Paquirri. El de hoy era el cartel más importante de la Feria de Nuestra Señora de las Mercedes, pero la ganadería, bien armada, escaseaba clase.
Brillante es el adjetivo que se le puede aplicar a la faena de Perera en el primero de su lote, ya que la casta del animal no alcanzaba la garra del extremeño, siempre dispuesto a darlo todo en la plaza, tras su triunfo de ayer en Logroño. Por eso, el de Puebla del Prior no se achantó ante lo que se le podía venir encima, desenvainó esa valentía que le hace único y dio buenos muletazos y cerró el primero de su tanda con circulares, hasta entrar a matar.
En el último de la tarde, Perera bien pudo haber cortado las dos orejas, como en el anterior. Exprimió al toro, sacó jugo a cada segundo de la faena, pero el astado, poco a poco, se fue consumiendo, como metiéndose en su propio mundo, ajeno al hecho de que estaba en una plaza de toros.
El público cordobés, acostumbrado a toreros de verdadera raza, supo premiar a Perera con dos grandes ovaciones, a la que seguro que se unió, desde el Cielo, Francisco Rivera "Paquirri".
Pozoblanco (Córdoba). Viernes 25 de Septiembre. 1ª de Feria, Tres cuartos. Toros de Jaralta, bien presentados pero de poca clase. El 4º, con mucho peligro.
-Morante de la Puebla: oreja y silencio.
-El Juli: oreja y saludos.
-Miguel Ángel Perera: ovaciones en ambos.
Los de Jaralta entraban con ganas en el mítico coso de Pozoblanco un día antes de que se celebrara el 25 aniversario de la astada mortal, en la misma arena, del maestro Paquirri. El de hoy era el cartel más importante de la Feria de Nuestra Señora de las Mercedes, pero la ganadería, bien armada, escaseaba clase.
Brillante es el adjetivo que se le puede aplicar a la faena de Perera en el primero de su lote, ya que la casta del animal no alcanzaba la garra del extremeño, siempre dispuesto a darlo todo en la plaza, tras su triunfo de ayer en Logroño. Por eso, el de Puebla del Prior no se achantó ante lo que se le podía venir encima, desenvainó esa valentía que le hace único y dio buenos muletazos y cerró el primero de su tanda con circulares, hasta entrar a matar.
En el último de la tarde, Perera bien pudo haber cortado las dos orejas, como en el anterior. Exprimió al toro, sacó jugo a cada segundo de la faena, pero el astado, poco a poco, se fue consumiendo, como metiéndose en su propio mundo, ajeno al hecho de que estaba en una plaza de toros.
El público cordobés, acostumbrado a toreros de verdadera raza, supo premiar a Perera con dos grandes ovaciones, a la que seguro que se unió, desde el Cielo, Francisco Rivera "Paquirri".
Pozoblanco (Córdoba). Viernes 25 de Septiembre. 1ª de Feria, Tres cuartos. Toros de Jaralta, bien presentados pero de poca clase. El 4º, con mucho peligro.
-Morante de la Puebla: oreja y silencio.
-El Juli: oreja y saludos.
-Miguel Ángel Perera: ovaciones en ambos.